La cirugía laparoscópica es una alternativa mínimamente invasiva a la cirugía abierta convencional en la que se utiliza una pequeña cámara y pequeños orificios en la pared abdominal para realizar el procedimiento quirúrgico.

 

No todos los pacientes son candidatos a la cirugía laparoscópica, por lo que deberá de ser valorado por su cirujano para indicarle la mejor opción en cada caso.

 

En la actualidad, el desarrollo de la técnica ha hecho que se pueda utilizar en un gran número de patologías y especialidades: cirugía de la vesícula biliar, cirugía colorrectal, cirugía de la hernia y eventraciones, círugía del reflujo gastroesofágico, cirugía gástrica, obesidad, diverticulosis, etc.

 

La cirugía laparoscópica presenta ventajas como:

 

• Menor dolor postoperatorio.

• Recuperación más rápida con estancia hospitalaria más corta.

• Retorno más rápido a su actividad habitual, laboral y física.

• Mejor resultado estético

• Menor incidencia de complicaciones de las heridas (infecciones, hematomas, eventraciones...).